Desde la Sociedad Rural, Eduardo Bagnis, consideró que el Consejo Económico y Social les permitirá impulsar proyectos sobre la generación de valor agregado en origen y buenas prácticas agrícolas
El presidente de la Sociedad Rural de Río Cuarto, Eduardo Bagnis, manifestó ayer que tiene “grandes expectativas” por el trabajo que se puede hacer desde el Consejo Económico y Social recientemente constituido en la ciudad, del que forma parte junto a otras organizaciones como el CECIS, el Foro de Profesionales, los colegios profesionales y el vecinalismo.
“Desde el mismo momento en que fuimos convocados nos pareció una muy buena idea, porque al haber una gran variedad de intereses e inquietudes, las iniciativas que de allí surjan contribuirán, seguramente, a mejorar las condiciones de vida de los riocuartenses y, es nuestro deseo, al desarrollo regional”, afirmó Bagnis, quien además de ser productor, es médico veterinario y docente de la UNRC.
Como se recordará, entre las funciones del Consejo está la elaboración de estudios e informes sobre economía, relaciones laborales, empleo y seguridad social, asuntos sociales, agricultura, ganadería y alimentación, educación y cultura, salud y consumo, medio ambiente, transporte y comunicaciones, industria y energía, vivienda y desarrollo regional.
Para Bagnis, es poder participar de un cuerpo tan heterogéneo será sin dudas una actividad enriquecedora. “En nuestro caso, creemos que será el marco justo para discutir cuestiones productivas que a veces exceden el marco propio de la actividad agropecuaria. Mucho de lo que nosotros hacemos incide en la vida económica y social de la comunidad y es bueno contar con un espacio de análisis y debate como éste”, afirmó, para destacar que entre los temas que les interesa impulsar se encuentran la generación de valor agregado a los commodities que se producen en la región y las buenas prácticas agrícolas.
“Desde la Rural venimos propiciando la puesta en marcha de proyectos asociativos o apoyando emprendimientos particulares que puedan dar un valor agregado a lo que producimos, como una manera de generar mayores ingresos y puestos de trabajo a nivel local. Si no, todo se va afuera sin valor agregado y con mayores costos para el productor y para los demás componentes de la cadena”, afirmó.
Se refirió también a la necesidad de que los productores, aplicadores, transportistas, industriales y acopiadores, entre otros, tomen conciencia de los beneficios de trabajar de acuerdo con las buenas prácticas agrícolas. “Esto es algo que venimos analizando en conjunto con otras entidades y nos parece también que el poder abordar estas cuestiones en el Consejo nos permitirá conocer el pensamiento de los demás sectores de la comunidad y formular acciones que nos permitan evitar los problemas que sufren otros centros urbanos donde no existen estos espacios de diálogo”, concluyó.
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