Las estimaciones se concretan sobre un valor de producción de 55 millones de toneladas. Eso implicaría un alza del 37% en la cosecha con respecto al ciclo anterior, a lo que se suma un elevado precio mundial
Las condiciones climáticas en amplias zonas productivas del país apuntalan las estimaciones optimistas que anticipan una posible cosecha récord de soja, lo que le permitiría a su vez a la Argentina tener un ingreso histórico de divisas, cercano a los 23.400 millones de dólares. Eso equivale, en términos comparativos, a casi cuatro presupuestos de la provincia de Córdoba.
Es que las abundantes precipitaciones que se vienen registrando, incluso desde antes de la primavera, llevaron a que los cálculos de rinde se vayan ajustando al alza. Ese proceso fue sólo cuestionado por el exceso hídrico provocado por las lluvias en sectores de Santa Fe, Buenos Aires y Este de Córdoba. Si bien la evolución de esos lotes anegados es seguida de cerca por la implicancia en la cosecha final, el volumen general, en combinación con el valor internacional del poroto, abre una perspectiva alentadora.
Hasta aquí, en valor bruto de producción, la campaña 2010/11 fue la que aportó mayor cantidad de dólares con 25.100 millones de dólares. Luego le siguió la 2007/08, con 22.716 millones. Ahora, si el clima sigue colaborando, podrían superarse todas esas cifras, porque los 55 millones de toneladas implicarían un crecimiento del 37% en la cosecha nacional con respecto al último registro.
“De la combinación de las variables precio y cantidad surge un valor de la cosecha argentina en dólares para la campaña 2012-13, antes de retenciones y otros descuentos, del orden de los US$ 27.610 millones, que implica US$ 5.521 millones más respecto al valor con el que finalizaría la cosecha 2011- 2012, que se estima rondaría los US$ 22.000 millones”, apunta un estudio del Instituto Argentino de Análisis Fiscal (Iaraf).
El informe sobre la campaña de soja destaca al mismo tiempo que “sin embargo, en este punto debe mediar la cautela, ya que existe el riesgo de que el exceso de lluvias afecte de manera negativa a los rindes. Si bien todavía no hay reportes de contingencias adversas, existe una serie de riesgos como la presencia de enfermedades en los cultivos, posibles inundaciones en las regiones agrícolas y los excesos de humedad”, señaló el trabajo firmado por Nadim Argañaraz y Valentina Bulgarelli.
Los economistas destacaron que en ese marco “el valor de las exportaciones para la campaña 2012-13 podría ascender a US$ 23.469 millones, teniendo en cuenta un coeficiente razonable de toneladas exportadas/toneladas producidas. Este dato es de suma relevancia ya que implica que la cosecha sojera 2012-2013 aportaría cerca de US$ 4.693 millones extras durante 2013”, remarcó el Iaraf.
En este contexto, el gobierno podría recaudar US$ 8.214 millones de derechos de exportación a la soja. Suponiendo un tipo de cambio promedio de 5,5 pesos por dólar para 2013, las retenciones serían de $ 45.177 millones y el Fondo Federal Solidario destinado a las provincias y municipios de $ 13.553 millones.
Impacto climático
Al considerar un posible impacto climático en lo que queda de la campaña -recién se está completando la primera mitad de la siembra- dado el precio futuro internacional, por cada millón de toneladas menos de producción sojera ingresarían US$ 427 millones menos de sojadólares al país durante la campaña 2012-13. Esta baja representaría US$ 149 millones menos de ingresos al Estado en concepto de retenciones a las exportaciones.
“Un aspecto clave que surge de este informe es que, dado el precio futuro considerado (el cual es menor al promedio alcanzado en 2011-12), se puede estimar cuál es el nivel de producción de soja que permitiría alcanzar el mismo valor bruto de la cosecha que este año (US$ 22.089 millones). Esta estimación arroja un resultado de 44 millones de toneladas de soja, es decir, un nivel de producción de 11 millones de toneladas más bajo que el proyectado para el año que viene”, destacó el informe. En otros términos, la producción nacional debería perder una de cada cinco hectáreas sembradas y asimismo mantendría los ingresos, en dólares, del ciclo pasado.
11 millones
Aun perdiendo esa cantidad de toneladas de soja, sobre la estimación actual de cosecha para la campaña en curso, el país recaudaría el mismo volumen de dólares que en el ciclo anterior. Así, con la cotización del poroto, con 44 millones de toneladas se aseguraría los 22.089 millones de dólares del año pasado.
23.469
Son los millones de dólares que ingresarían por la exportación de soja ante una cosecha cuyo valor bruto rondaría los U$S 27 mil millones. La cosecha dejaría así 4.693 millones de dólares más que en el ciclo anterior.
Con atraso, se sembró el 45,2% de la superficie
Un 45,2% del área estimada de soja de 19,7 millones de hectáreas fue implantada, con un retraso del 11% anual, mientras que se retomó la siembra de maíz, que es tardío y en total alcanza al 52,4 % en todo el país.
Así lo consignó el último informe del Panorama Agrícola Semanal (PAS) de la Bolsa de Ceeales de Buenos Aires, que ubicó “las mayores demoras de siembra” sobre el centro norte y sur de Córdoba”.
Mientras que en territorio cordobés la demora se debió a “la falta de humedad superficial”, que “retrasó la incorporación de cuadros de primera ocupación”, en la región bonaerense fueron como “consecuencia del elevado volumen de agua acumulada por el paso de sucesivos frentes de tormenta”.
Además, “los núcleos productivos Norte y Sur se encuentran próximos a finalizar la implantación de los cuadros de primera” de soja.
“Simultáneamente, y a medida que avanza la recolección de los cereales de invierno (trigo y cebada), comenzaron a relevarse siembras de segunda ocupación en sectores puntuales del centro norte de Santa Fe, Núcleo Norte y centro este de Entre Ríos”, explicó el PAS. En tanto, gran parte “de la franja central (centro norte y sur de Córdoba, centro norte de Santa Fe, Núcleo Norte y Sur, y centro este de Entre Ríos) aporta el 82% de los 8,9 millones de hectáreas ya sembradas a nivel nacional”, se dijo.
Los especialistas destacaron que “en esta región el estado de los cuadros implantados varía de bueno a muy bueno”. Mientras que los productores de la región bonaerense afectada por anegamientos e inundaciones lograron implantar el 50% del área prevista para soja de primera.
“Lentamente en la zona núcleo maicera ha comenzado la siembra de lotes tardíos de maíz con destino grano comercial”, informaron. A nivel nacional fue sembrado el 52,4% del “área tentativamente proyectada en 3,4 millones de hectáreas para la campaña en curso.
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