La actividad provincial quedó más expuesta a la crisis que la nacional. Hubo una caída generalizada. No se salvaron ni la construcción, ni el campo.
La economía provincial se ha ido desacelerando de manera general, rubro por rubro, durante el 2012. Así, Córdoba sufrió una caída en la inversión y en las exportaciones.
Paralelamente, el gasto público, en vez de generar una política anticíclica, también terminó frenándose, lo que incrementó las consecuencias de la marcha más lenta de la actividad.
Esas son las conclusiones de un estudio del Instituto Argentino de Análisis Fiscal (Iaraf) que comanda el economista Nadín Argañaraz.
“Córdoba no es una isla” se titula el escrito y hace un análisis del impacto que, área por área, sufrió la economía provincial durante el año que termina.
El estudio, firmado por el propio Argañaraz y por Daniela Cristina, señala que las ramas más importantes del Producto Bruto están ligadas a las actividades inmobiliarias, empresariales y de alquiler, la construcción. Ese grupo de actividades representan el 30 por ciento de la economía cordobesa. Otro 30 por ciento se lo llevan la industria manufacturera y el comercio y, por último, las actividades agropecuarias representan el 10 por ciento del total. Así, ese conjunto de ramas concentran el 70 por ciento de la actividad económica en Córdoba y, precisamente, han sido los sectores que más se han visto resentidos por los cambios en la actividad económica durante el 2012.
* Desde noviembre de 2011, el sector inmobiliario ha visto resentida su actividad, señala el informe de Iaraf. Y, según los datos de la Cámara Inmobiliaria Argentina, el volumen de negocios cayó un 85 por ciento entre enero y octubre.
* En cuanto a la construcción, que es uno de los sectores más dinámicos de la economía tanto por el efecto multiplicador en el resto de las actividades como por la contribución a la creación de empleo, también ha sufrido una importante baja.
“Precisamente, despachos de cemento presentó en octubre una caída interanual de 4,39 por ciento, la séptima baja consecutiva registrada por este indicador”, se lee en el informe elaborado por el Iaraf.
* La industria manufacturera también se desaceleró. Los datos oficiales indican que cayó un 3 por ciento. “El sector automotor es una de las actividades manufactureras más importantes de la provincia y ha sido sin dudas el principal motor de la industria cordobesa. El contexto externo (y fundamentalmente la desaceleración de Brasil) tuvieron un impacto significativo sobre las exportaciones de la provincia. En efecto, de acuerdo a datos de la Dirección General de Estadísticas, las ventas externas totalizaron 6.785 millones de dólares entre enero y agosto de 2012, 7 por ciento menos que los 7.296 millones evidenciados durante el mismo período del año pasado”, dice el informe. Y agrega que es una retracción demasiado importante para un rubro clave de la economía provincial y que estuvo originada por la fuerte caída de las ventas a Brasil.
* Además, la campaña agrícola tampoco acompañó. La sequía registrada al inicio de 2012 hizo que el nivel de producción cayera un 31 por ciento y el valor bruto de la producción se redujo en un 25 por ciento.
* El cóctel de bajas terminó impactando en el mercado laboral. En Córdoba, la demanda de empleo ya lleva diez meses de caídas interanuales.
PUNTAL
Facebook
Twitter