No se implantarían maíz ni soja en un millón de hectáreas por los excesos de agua.
Según imágenes satelitales, en la provincia de Córdoba hay riesgo de que este año se dejen sin sembrar un millón de hectáreas por la continuidad de las inundaciones en los campos. Se trata del 11% de las tierras productivas de la provincia, que ascienden a poco más de 9 millones de hectáreas.
El trabajo fue realizado por Pablo Ginestet, productor, experto en imágenes satelitales y drones y delegado en la Comisión Nacional de Emergencia y Desastre Agropecuario por Confederaciones Rurales Argentinas (CRA). Sobre la base de imágenes satelitales del Landsat 8, Ginestet hizo un análisis de la situación hídrica de los departamentos de Presidente Roque Sáenz Peña, Marcos Juárez, Unión, Juárez Celman, General San Martín, San Justo y General Roca, que representan más del 56% del área cultivada de la provincia.
En hectáreas, esos departamentos reúnen unos 5 millones de hectáreas y se hacen en ellos el 69% del trigo provincial, el 86% de la cebada, el 57% de la soja, el 44% del maíz, el 72% del girasol, el 56% del maní y el 52% del sorgo.
De los departamentos cordobeses, Roque Sáenz Peña, Unión y Marcos Juárez son los de mayor grado de afectación.
“Hay zonas que están muy comprometidas, con situaciones que tienen más de un 50% de afectación. En todos los casos está descontada la superficie que históricamente ocuparon los cuerpos de agua permanentes, sean éstos lagunas o bañados”, expresó el especialista.
Ginestet calculó sobre la base de las imágenes satelitales que en la actualidad hay 500.000 hectáreas de maíz y soja que no se han podido recolectar por estar inundadas o anegadas, en las cuales no pueden entrar las cosechadoras.
La amenaza es fuerte para la próxima campaña. En esta línea, si se toman en cuenta las zonas inundadas y el efecto de las napas freáticas -en muchas zonas ubicadas a menos de un metro de profundidad-, hay cerca de otro millón de hectáreas que están afectadas.
Según Ginestet, esas hectáreas “posiblemente este año corran serio riesgo de que no se puedan sembrar, acarreando con ello un gran perjuicio económico futuro, tanto al productor como a las arcas provinciales y nacionales”.
Aunque Córdoba tuvo cinco inundaciones importantes en los últimos dos años, los productores de la región creen que, además, hay un déficit de infraestructura con obras que no se concretaron. Por ese motivo hay varias regiones en las que las aguas no escurrieron.
Recientemente, el ministro de Agua, Ambiente y Servicios Públicos de Córdoba, Fabián López, dijo a LA NACION que este año se invertirán no menos de 600 millones de pesos en 40 obras hídricas de distinta envergadura, que estarían terminadas para fin de este año.
Fernando Bertello LA NACION. Con la colaboración de Gabriela Origlia