Una visión integral para la conservación de suelos, el buen manejo hídrico y la mejora de caminos

Columna de la Sociedad Rural de Río Cuarto publicada en el suplemento Tranquera Abierta de diario Puntal.

En el seno de la Sociedad Rural de Río Cuarto se dio el puntapié inicial para una nueva articulación público-privada entre el Gobierno de la Provincia y los productores: la futura conformación del consorcio integrado para el manejo de cuencas regional, que unificará en un sistema de acción a los consorcios camineros, canaleros y de conservación de suelos.

El objetivo central del Gobierno es dividir la provincia en consorcios integrados para atender los problemas hídricos, de conservación de suelos y del deterioro de los caminos rurales.

A fines del año pasado se conformó el primer consorcio de estas características, denominado Río Jesús María-Río Pinto, que abarca a 300 mil hectáreas del norte, y se espera que en los próximos 60 días se pueda integrar el correspondiente a una vasta región del sur provincial, que comprende unas 450 mil hectáreas.

La cuenca delimitada para el sur va del arroyo Santa Catalina al norte y al este, del arroyo Sampacho hacia el oeste, embalse de Achiras, entre otros puntos, y termina en la represa de Tigre Muerto, en un radio que agrupa a numerosos consorcios que vienen trabajando de manera autónoma.

Esta nueva modalidad de trabajo que se impulsa busca promover el manejo coordinado y racional de los recursos naturales de la región mediante planes, programas, proyectos y obras orientadas a la resolución integrada de la problemática hídrica, agropecuaria y de infraestructura, conformando una sola unidad de planificación, ordenamiento y gestión territorial.

Al respecto, el gobernador Juan Schiaretti afirmó: “Lo que debe mandar en los procesos de integración es la cuenca hídrica y este tipo de decisiones no pueden establecerse mediante una ley, sino que deben ser fruto de los consensos entre productores. La interacción entre público y privado permite caminar en la dirección de lograr más productividad, por lo tanto más progreso con justicia social, cuidando siempre el medioambiente y el suelo”.

Ahora el Gobierno de la Provincia deberá afinar el lápiz y elaborar un presupuesto acorde a las necesidades de la región, en un trabajo conjunto entre los ministerios de Agricultura y Ganadería, de Obras Públicas y Financiamiento y de Servicios Públicos, que hasta el momento venían coordinando tareas de manera autónoma con los consorcios de conservación de suelos, camineros y canaleros, respectivamente.

En la mayoría de los productores hay una buena receptividad a esta nueva modalidad de trabajo y esperan que el presupuesto contemple los recursos necesarios para llevar adelante las obras indispensables.

También hay un convencimiento general de que el mantenimiento de los caminos rurales como se viene haciendo hasta ahora no ofrece los resultados deseados porque en muchos casos se han convertido en verdaderos ríos secos, donde el agua que sale de los campos los profundiza, los corta y los destruye, lo cual demanda demasiado esfuerzo y dinero sin que se solucione el problema de fondo.

Por eso, la Provincia promete avanzar en el corto plazo en la conformación de la cuenca regional, con todos los actores sentados en una misma mesa y siguiendo la misma lógica que tiene el fideicomiso de desarrollo agropecuario.