Ese país fue el más afectado por las trabas del Gobierno y el parate económico; hasta septiembre, las exportaciones acumulan una contracción de 3%
La caída en las importaciones de la Argentina -provocada por las trabas impuestas por el Gobierno y también por la desaceleración de la economía- ha afectado sobre todo a Brasil. Entre enero y septiembre de este año, las importaciones totales sumaron 50.910 millones de dólares, 4506 millones menos que en el mismo período de 2011. El 70% de esa caída responde a menores compras desde el país vecino.
Las cifras surgen del informe sobre intercambio comercial publicado ayer por el Instituto Nacional de Estadística y Censos (Indec). Según ese informe, en los primeros nueve meses del año las compras al país vecino sumaron US$ 13.245 millones, 19% menos que en igual período de 2011. Sólo en septiembre, las compras desde Brasil se desplomaron 29% interanual, caída mucho más pronunciada que el 14% de las importaciones totales.
“Las trabas de Moreno están dirigidas a Brasil, porque lo que importamos de allá es lo que más compite con nuestra industria”, dijo Luciano Cohan, economista jefe de la consultora Elypsis. En tanto, el director de Desarrollo de Negocios Internacionales (DNI), Marcelo Elizondo, dijo: “Las importaciones de Brasil son las más fáciles de restringir. No se puede hacer lo mismo con equipos avanzados que vienen, por ejemplo, desde Europa y que son más difíciles de reemplazar”.
Distinta fue la opinión del director del Programa de Integración Global y Desarrollo Productivo del Cippec, Lucio Castro, que dijo: “No veo una intencionalidad específica contra Brasil. Para mí ese país fue el más afectado por dos razones. Primero, porque es el socio con el que tenemos el mayor volumen de comercio. Y, segundo, por la fuerte desaceleración económica en la Argentina, que afectó a sectores muy vinculados con Brasil”.
En los primeros nueve meses del año, las importaciones provenientes de Brasil registraron caídas en todos los grupos de productos. Las más pronunciadas, en montos, fueron las de bienes intermedios (US$ 902 millones menos), bienes de capital (US$ 878 millones) y sus piezas y accesorios (US$ 684 millones).
Las exportaciones al país vecino también cayeron, al pasar de US$ 12.806 millones en los primeros nueve meses de 2011 a 12.031 millones en el mismo período de este año, lo que implica una contracción de 6%. Si bien el 30% de esa caída se explica por las menores exportaciones de “material de transporte terrestre” -es decir, vehículos-, también se verifica un pobre desempeño en otros productos manufactureros, como lácteos, textiles y bienes de la industria del papel.
Para Castro, las menores ventas a Brasil responden a la desaceleración en esa economía, mientras que, según Elizondo, se explican por la pérdida de competitividad de la industria local y por las dificultades de los exportadores para acceder a créditos, a raíz de los retiros de los depósitos en dólares.
En los primeros nueve meses del año las exportaciones totales de la Argentina sumaron US$ 61.852 millones, 3% menos que en el mismo período de 2011. Sólo en septiembre, las ventas al exterior se desplomaron 12%, la caída más pronunciada desde 2009. Al respecto, un informe de Elypsis señala: “La mayor caída interanual de exportaciones correspondió al rubro de productos primarios (-27%). La caída estuvo principalmente motivada por la exportación de soja (que llega al cuarto trimestre con un muy bajo nivel de stocks)”.
Dado que las importaciones se contrajeron más que las exportaciones, en septiembre el país alcanzó un superávit comercial de US$ 911 millones. Para el acumulado de los primeros nueve meses, el saldo positivo llega a US$ 10.942 millones, 34% más que en 2011.
Por José Hidalgo Pallares | LA NACION