Para Gerardo Colombano, presidente de la Cámara de Productores de Ovinos de la provincia de Córdoba, la producción de corderos se combina muy bien con la agricultura y la ganadería, y está en pleno crecimiento
La producción ovina está hoy en franco crecimiento y así lo demuestra el interés de los productores en las exposiciones rurales, donde los reproductores se venden muy bien y a precios por encima de los de cabaña. Gerardo Colombano, presidente de la Cámara de Productores de Ovinos de la Provincia de Córdoba, considera que la actividad crece día a día porque hay mucho interés de parte de los productores, aunque –como en todas las actividades productivas- se nota la falta de financiamiento. “El productor que puede crecer con su propia majada, dejando sus propias hembras, lo trata de hacer. Y hay productores con interés metiéndose en la producción o acrecentándola por su cuenta”.
“La gente ve que es un negocio rentable, el más rentable de la producción agrícola ganadera,y hoy eso genera interés. Además combina bien con la agricultura y la actividad bovina, se adapta a cualquier espacio, desde la montaña hasta la pradera”, afirmó, para añadir que siempre que se de mejor alimentación, se obtiene mejor resultado. “Es un animal noble que con cualquier pastura que le damos expresa su resultado. Y más aún cuando utilizamos genéticas como las que vemos hoy en Córdoba y en el país, los resultados están a la vista”.
Colombano participó a comienzos de mes de la Exposición Rural de Río Cuarto, donde con sus reproductores protagonizaron unas buenas ventas. “El remate fue ágil, con muy buenos ejemplares y buenos valores”, puntualizó.
A su juicio, los productores están trabajando muy bien y poniendo muy buena genética, y eso es aprovechable. El futuro en todo tipo de hacienda se lo ve muy auspicioso a pesar de la crisis, tenemos expectativas con la comercialización de la carne, la exportación y demás factores que alientan a los productores a mejorar lo que venden. Aunque aclaró que “en momentos de volatilidad cambiaria, arriesga más el que vende que el que compra, porque nunca se sabe qué precio es el correcto”.
En cuanto a la raza Texel, su preferida, es una raza muy rústica que se adapta en cualquier espacio.”Es una raza carnicera, de buena lana, carne magra y esas ventajas nos sirven, el paladar de la gente exige carne magra, no le gusta ver el cebo en el plato y este animal rinde esas condiciones, en calidad terminal, por su respuesta y precocidad”, enfatizó.
Dijo finalmente que el crecimiento de la actividad se nota también en la Cámara que preside, donde cada día tienen más socios. “Esto se debe al mayor interés por la producción ovina pero también por todo lo que se hizo en difusión y promoción, capacitaciones y jornadas que se hicieron. Todo eso marcó el interés, como también el apoyo, aporte y acompañamiento del Gobierno de Córdoba, a través del Ministerio de Agricultura y la Secretaría de Ganadería hacia la cámara”, concluyó Colombano.
PUNTAL TRANQUERA ABIERTA