A las 8, Martín Tuculet se frotaba las manos por el frío helado que hacía en el campo. Pero luego directamente se quedó duro, congelado. De una combi bajó alguien que no esperaba: el presidente de la Nación, Mauricio Macri. “Hola Mauricio, perdón, Presidente”, intentó corregirse apenas se pudo acomodar de esa sorpresa tan temprano.
La escena, en el día del paro de la CGT, transcurrió a 50 kilómetros de Tandil y duró algo más de 30 minutos. A Tuculet le sirvió para hablar con el Presidente sobre el negocio de la agricultura y el del tambo. Incluso, el productor se quedó con una definición que, según contó, le dio el jefe de Estado: no se van a modificar las retenciones. Un mensaje clave en un momento de fuertes rumores sobre que el Gobierno analizaría suspender la baja de los derechos de exportación en soja (están reduciéndose 0,5% por mes desde enero pasado y ya tienen una tasa del 27%).
La semana pasada, a Tuculet lo contactaron porque el Gobierno quería filmar unas imágenes sobre la siembra de trigo, una suerte de spot para mostrar “la revancha” del cultivo en los últimos dos años tras la quita de las retenciones y de las trabas para exportar. Hasta su campo fue un equipo técnico para hacer la filmación. Ayer lo llamaron para decirle que estaba la posibilidad de que lo visitara el ministro de Agroindustria de la Nación, Luis Miguel Etchevehere. En rigor, Etchevehere fue el primero en bajar de una combi y detrás de él lo siguieron la gobernadora María Eugenia Vidal y el presidente Macri. Del jefe de Estado no tenía ningún indicio previo.
Tuculet representa a una empresa familiar mayoritariamente ligada con la actividad lechera. Industrializa unos 12.000 litros diarios que provienen de un tambo de casi 600 vacas lecheras Jersey. La leche se usa para hacer mozzarella y ricota. El productor provee a pizzerías y rotiserías con la marca Aimá. De lo que hace con la actividad lechera le habló en detalla a Macri.
En el caso de la agricultura, por la sequía y una posterior fuerte helada, Tuculet perdió 75% de la soja de segunda (implantada después de la cosecha de trigo). Precisamente, con Macri el productor habló de las perspectivas para la nueva campaña. “Apunta a un buen año si no hay un desastre climático”, le expresó el productor a su visitante. En todo momento, el Presidente se mostró interesado por saber qué tenía en el campo. “¿Qué tenés alrededor?”, le preguntó en otro momento. Había unos silobolsas con alimento para el ganado y así se lo hizo saber al jefe de Estado.
Macri después le consultó sobre qué necesita como productor agropecuario. Sigilosamente, Tuculet le expresó: “Como todo empresario, necesitamos reglas claras y objetivos compartidos”. La respuesta del presidente no se hizo esperar. Según el productor, el mismo Presidente sacó una referencia sobre los derechos de exportación que hoy son objeto de decenas de versiones.
“Las retenciones no se van a modificar; quedate tranquilo”, le señaló el jefe de Estado, según relató Tuculet.
También hubo espacio para la lechería. “Estamos complicados con la lechería; los costos suben por el ascensor y los precios (pagados a los productores) por la escalera”, precisó el tambero.
Macri devolvió el comentario explicando que la inflación lo “desvela” y que quiere terminar con ella porque es “un flagelo” para la economía.
“Las retenciones no van a volver”
Después de visitar a Tuculet, Macri dio una entrevista al multimedios El Eco. Allí, ante una consulta volvió a referirse a las retenciones. “Las retenciones se fueron y no van a volver”, dijo el Presidente. Luego dijo. “El único país que ha castigado al que quiere exportar es la Argentina”.
FERNANDO BERTELLO – LA NACIÓN
