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En promedio, 1 de cada 4 pesos que se paga por pan, leche y carne son impuestos

En el caso del pan, la carga tributaria es mayor que el precio de la propia harina para elaborar ese producto. En la carne, de $ 531 de valor promedio por kilo, $ 149 son impuestos.

 

La Fundación Agropecuaria para el Desarrollo de Argentina (FADA) publicó un nuevo informe sobre lo que paga el consumidor cuando compra pan, leche y carne, donde la carga impositiva es muy gravitante, ya que en promedio significa 1 de cada 4 pesos del valor del producto.

Los últimos datos arrojan que el precio del pan se multiplica por siete desde que sale como trigo del campo, hasta el pan de nuestra mesa. De $ 135, precio promedio de un kilo de pan, $ 29 pesos son impuestos. La carga impositiva es mayor que lo que sale producir el trigo y hacer la harina para ese kilo de pan.

En el caso de la leche el precio se triplica desde que sale del tambo, pasa por la industria, el comercio y llega a nuestro desayuno. De $ 67 de precio promedio de un litro de leche, $ 18 corresponde al peso impositivo.

La carne es el producto más afectado por la “mochila” de los impuestos, de $ 531 de precio promedio por kilo, $ 149 son impuestos.

“Algo llamativo de este estudio es que demuestra la alta carga tributaria que tienen alimentos que son básicos, como el pan, la carne o la leche. En promedio, 1 de cada 4 pesos que pagamos por estos productos, son impuestos que se acumulan a lo largo de la cadena. En el caso del pan, pesan más los impuestos, que la propia harina”, destaca David Miazzo, economista jefe de FADA.

“Este trabajo ayuda a mostrar qué hay detrás de los precios. En momentos donde la inflación se acelera se tiende a discutir los precios, la cadena y los costos de los distintos productos, pero en realidad el problema no es de un precio en particular. Hoy es el problema del precio de la carne, mañana el combustible y pasado los alquileres. El problema de fondo es el valor de la moneda, cada vez se necesitan más pesos para comprar el mismo kilo de carne, de tomates, el litro de nafta o una remera”.

“No es un tema de precios, tenemos un problema macroeconómico. Un profundo déficit fiscal que se financia emitiendo pesos que, sumado a falta de confianza, se traducen en pesos que cada vez valen menos: eso es la inflación”, definió.

Para comprender cómo se va componiendo el precio, se tiene en cuenta todos los costos, impuestos y resultado que se obtiene en cada eslabón. Por ejemplo, en el caso de la leche se considera desde el costo de la tierra del campo, de estructura, alimentación, sanidad animal, personal, etc. En la industria, la materia prima, logística, personal, gastos comerciales, transporte y en el comercio, también se incluyen sus propios costos operativos. En cada eslabón del circuito, los impuestos van cargando un alto porcentaje del precio, detalló Natalia Ariño, economista de FADA.