Los análisis se vienen haciendo desde entonces de manera artesanal.
Dos años atrás se averió el equipo analizador de proteínas en cereales del Laboratorio Vegetal del Senasa. Y no se puede reparar porque, al tratarse de un dispositivo descontinuado, ya no se comercializan repuestos del mismo.
Desde entonces, según consigna el sitio Valorsoja.com, los técnicos del organismo vienen reclamando al gobierno de turno que se adquiera un equipo NIR (infrarrojo por reflectancia) o NIT (infrarrojo por transmitancia) de alto poder de procesamiento de muestras, el cual, según los diferentes modelos, tiene un costo de 30.000 a 40.000 euros.
Un equipo moderno, como el que tienen los laboratorios de las Cámaras Arbitrales de las Bolsas de Cereales, industrias molineras y compañías exportadoras, permitiría procesar unas 1000 muestras por día. Actualmente los técnicos del Senasa sólo pueden analizar, con métodos artesanales, apenas 50 a 60 muestras por día.
Entre las responsabilidades del Laboratorio Vegetal del Senasa se encuentra la coordinar y realizar las certificaciones de calidad comercial, industrial y sanitaria en productos, subproductos y alimentos provenientes de commodities agrícolas.
En apenas un mes comenzará a ingresar al mercado la cosecha argentina de trigo 2016/17. Pero, si no se dota al Laboratorio del Senasa de un equipo acorde a la responsabilidad que detenta, entonces la mayor parte del mapa de calidad del cereal argentino será realizada en laboratorios privados.
edicionrural.com
